La psicología, la meditación, la relajación, juegan un papel clave en el sueño; si pasas el día yendo a toda prisa y con mil cosas en la cabeza, sin detenerte a meditar en lo que haces o pasar un rato tranquilo sin hacer nada, lo normal es que luego te cueste dormir.
Vivimos en una sociedad donde todo se hace demasiado deprisa, con demasiado estrés, y eso influye tanto en nuestros pensamientos, hasta el punto de que nos cuesta desconectar, nos supone un gran trabajo hacer el ejercicio de concentrarnos en algo que todos deseamos: descansar.
Vamos a hablar del Feng Shui, literalmente viento y agua. El arte de armonizar el espacio para que la energía circule de manera fluida sin crear bloqueos, estancamientos o desarmonías que puedan afectar a nuestra salud. Y más concretamente vamos a ver cómo aplicar el Feng Shui en nuestra casa.
Pero primero vamos a saber algo de la historia y aspectos básicos de esta filosofía. Esta comprobado que no solo percibimos con los 5 sentidos, también percibimos aquello que no puede verse, ni oírse, olerse, saborearse o tocarse,... y lo hacemos constantemente... ¿De qué hablo te preguntarás? Hablo de lo que en numerosas culturas le han dado diferentes nombres (Orgón, Numia, Ka, Pheuma, Mana, Energía sanadora de natura, Wakan etc.), pero en la tradición china se llama Qi o Energía vital.
El concepto de Qi, utilizado por la sabiduría milenaria china, significa energía o soplo vital. Es todo aquello de lo que está impregnada la naturaleza, los seres vivos y las cosas y está en constante cambio y transformación. Se ve modificado por todo lo que le rodea y por tanto, la forma y disposición del espacio, las orientaciones (puntos cardinales) y los cambios temporales, son aspectos influyentes entre otras muchas cosas.
En múltiples ocasiones, entramos a una casa, un restaurante o una oficina y emitimos expresiones del tipo "da buen o mal rollo", "me da buenas o malas vibraciones", "este sitio tiene algo que me hace sentir en paz o que me incomoda", etc. Lo que sentimos sería esta energía Qi.
¿Qué es el Feng Shui?
El objetivo del Feng Shui es que el Qi o energía vital de la que hablamos, fluya mejor, ya que como ahora veremos, influye de manera significativa en nuestro estado de ánimo, mental y físico. Para ello utiliza los colores, las formas, la orientación, etc. de los lugares, estancias, muebles y objetos para crear lugares más armónicos y equilibrados.
Según este sistema ancestral, que intenta utilizar los elementos a nuestro alcance para hacernos más favorables las energías del planeta, la posición y orientación del espacio, el lugar que ocupa nuestra casa, cómo y dónde están ubicados los muebles y la distribución de los objetos que nos rodean pueden influir significativamente en nuestro bienestar.
En occidente no solemos deparar en estos detalles, y decoramos las estancias exclusivamente según criterios de comodidad y siguiendo modelos de moda o decoración, pero podemos tener esto además de una decoración y disposición que influya positivamente en nuestra salud y bienestar. Te voy a explicar cómo.
Algunos aspectos básicos
Existen aspectos básicos e importantes a tener en cuenta para un mejor Feng Shui, y estos son:
- Los conceptos de Yin y Yang. Cuando hablamos de Yin hablamos de: la noche, la oscuridad, lo femenino, la quietud, el vacío,... y cuando hablamos de Yang nos referimos a: el día, la luz, lo masculino, el movimiento, el lleno,... estos dos conceptos complementarios son importantes porque forman un Tao, el equilibrio, siempre existe uno y el otro porque cada uno contiene al otro, cada uno tiene sentido gracias al otro.
En una casa, las zonas Yin son las más tranquilas y alejadas de la puerta de entrada, las que están al final de toda la casa. Son las más indicadas para las actividades de noche como los dormitorios. Las zonas Yang son las que tienen más movimiento, tienen mucho colorido, muebles, bullicio o ruido, calor y líneas rectas. Están siempre más cerca de la puerta de entrada. Estas zonas son las más indicadas para las actividades de día como la sala de estar o la cocina.
En un dormitorio, según las reglas del Feng Shui hay que dar protagonismo a la fuerza Yin por encima del Yang. Esto lo vamos a hacer con elementos, como por ejemplo: un ambiente silencioso, revestimientos suaves como alfombras, amplios espacios vacíos, mobiliario sin ángulos marcados, asientos bajos o iluminación indirecta.
- Los 5 elementos de la naturaleza o las 5 transformaciones: agua, madera, fuego, tierra y metal deben estar presentes y en equilibrio, como observamos en la imagen siguiente:
La Tierra, corresponde al Noreste y Suroeste. Esta principalmente en jarrones de cerámica, cristales de cuarzo natural y tierra.
El Agua, el Norte. Y los objetos: acuarios, fuentes, estanques, pozos.
- La limpieza y el orden son imprescindibles, pues permite que la energía fluya con libertad. Vamos a intentar tener la casa ordenada y evitar acumular objetos inservibles. Tampoco poner objetos debajo de las camas, mesas u otros muebles pues impiden el movimiento del Qi. Los aromas naturales y los inciensos aumentan el flujo de la energía y mucho mejor si son acompañados con música de relajación.
- Abrir las ventanas y ventilar la casa a menudo para que el oxígeno se renueve.
- Los animales domésticos son muy aconsejables, atrayendo el Yang moviéndose regularmente por toda la casa. Los maestros de Feng Shui aconsejan la posesión de tortugas que es un animal de protección del hogar. Los gatos suelen eligir zonas de radiaciones para sentarse o descansar, por tanto intentaremos no acomodarnos en dichos lugares. Los perros por el contrario eligen lugares donde la energía fluye y la vibración es más alta, estos sitios también son propicios para nosotros.
- Precaución con los espejos. Nunca los pondremos alineados con puertas y ventanas. Sobre todo los evitaremos frente a la puerta principal de la casa y en los dormitorios. En la entrada porque repele la energía y no entrará en la casa y en los dormitorios porque al ser considerados objetos Yang, nos perjudicarán el descanso. Si no los podemos evitar intentaremos que no reflejen la cama y que no sean excesivos.
- Mantener todas las puertas de las habitaciones cerradas durante la noche, ya sea la puerta del dormitorio, del armario o del cuarto de baño. De este modo estaremos permitiendo la mejor circulación de la energía para fortalecer la salud.
Feng shui y bienestar
Si te preguntas cómo podemos mejorar nuestra vida cambiando el diseño del dormitorio. ¡Sí, se puede!
"¿Sabías que con un simple movimiento de muebles puedes terminar sufriendo estrés, si pones una planta donde no debe ir puedes tener problemas de salud y si colocas un espejo o cualquier otro objeto en el lugar equivocado puedes sufrir pérdidas económicas?, nos dice el Equipo de Silva"
Los expertos en Feng Shui nos dicen que según el orden de lo que nos rodea y la decoración del espacio seremos más o menos felices, que éste también influye para que estemos más o menos sanos y que tendremos mayor o menor éxito en cada una de las áreas de nuestra vida si tenemos en cuenta algunos detalles.
El tiempo que pasamos en un determinado lugar también es muy importante, ya que éste termina convirtiéndose en vital e influyente para nosotros.
Teniendo esto en cuenta y partiendo que de promedio pasamos aproximadamente un tercio de nuestra vida durmiendo… ¿No es el dormitorio el lugar ideal para que empecemos a aplicar las ventajas que nos aporta esta técnica milenaria?
Queremos explicarte un poco más acerca del movimiento slow y como aplicar sus principios en nuestra vida, nos puede ayudar a dormir mejor. Es hora de reducir el estrés, la preocupación, la prisa y todo aquello que nos hace olvidarnos de disfrutar de las cosas que hacemos.
La psicología juega un papel clave en el sueño; si pasas el día yendo a toda prisa y con mil cosas en la cabeza, sin detenerte a meditar en lo que haces o pasar un rato tranquilo sin hacer nada, lo normal es que luego te cueste dormir.
Vivimos en una sociedad donde todo se hace demasiado deprisa, con demasiado estrés, y eso influye tanto en nuestros pensamientos, hasta el punto de que nos cuesta desconectar, nos supone un gran trabajo hacer el ejercicio de concentrarnos en algo que todos deseamos: descansar.
En este post queremos explicarte un poco más acerca del movimiento slow y como aplicar sus principios en nuestra vida, nos puede ayudar a dormir mejor. Es hora de reducir el estrés, la preocupación, la prisa y todo aquello que nos hace olvidarnos de disfrutar de las cosas que hacemos.
Aplicar la filosofía slow a tu vida
Si recuerdas, hace unos años Flex lanzó su campaña 40 días en la cama, donde una pareja (Ivan y Camy) decidía pasar cuarenta días en la cama para darnos a conocer los beneficios de una vida slow. Esta campaña ahondaba en el movimiento slow y trajo diferentes expertos y participantes de distintos ámbitos para aportar su punto de vista.
Como señalan en Ecointeligencia, vivimos como si no hubiera mañana, como si los recursos naturales fueran infinitos. Ante ese modo de vida desquiciado y acelerado, lo único que cabe hacer es bajar el ritmo. No se trata de acabar con todo. Llevar una vida slow no significa dejar de cumplir con nuestras responsabilidades; significa cumplirlas de otra forma.
Por ejemplo, si vas al trabajo andando, tu mente está concentrada en andar, observar lo que hay a tu alrededor, y sentir y disfrutar cada uno de tus movimientos, que serán pausados y metódicos.
Cuando hablas con alguien, no lo haces a toda velocidad, como una locomotora, irradiando nerviosismo, preocupación… Hablas más lentamente, midiendo las palabras, lo que tampoco es incompatible con ser sencillo e ir al grano.
Lo mismo cabe decir de otros ámbitos de la vida: las relaciones, los viajes, la cultura, los paseos… si nos proponemos ir despacio y tomar la vida con calma, disfrutaremos más de cada una de nuestras acciones.
La filosofía Slow hace hincapié tanto en los pensamientos que tenemos como en nuestros movimientos. Nació en la Plaza de España en Roma, en el año 1986, cuando el periodista Carlo Petrini conoció que iban a poner un Mcdonald’s en este lugar histórico, oposición que puso la semilla de este singular movimiento. Más tarde, Carl Honoré escribió el libro Elogio de la lentitud, donde se defiende y teoriza sobre un modo de vivir más sosegado.
¿Cómo llevar el movimiento slow a nuestro dormitorio para mejorar nuestra calidad de vida? ¿Qué principios básicos podemos aplicar para disfrutar mejor de nuestro descanso?
Consejos para un descanso slow
La filosofía slow aplicada al sueño implica concentrarnos en una única tarea, relajarnos y dejar de lado todo lo que nos pueda estorbar.
Bueno, no te vamos a decir que tienes que seguir necesariamente estos consejos al pie de la letra. Precisamente, el movimiento slow no se basa en normas, sino en principios. Cada persona es un mundo y lo que a unos les puede relajar, a otros puede ponerles nerviosos.
La actitud es una de las claves más importantes. No te obsesiones con seguir unas normas de relajación. Haz descansar la mente, no la hagas trabajar más.
¿Crees que llevas una vida lo suficiente pausada y relajada? ¿Sigues algún tipo de ritual a la hora de prepararte para el sueño? ¡Comparte tus consejos con nosotros! Te invitamos a que nos los hagas llegar a través de los comentarios, o bien escribiéndonos un mensaje al Facebook de Colchones.es o por nuestro Twitter @colchonesES.
Ser felices supone sobre todo responsabilizarnos de nuestra vida. Elegir aquello que nos hace vibrar, encontrar un motor dentro de nosotros que nos hace levantarnos cada mañana y vivir en plenitud. En el post de hoy os voy a dar algunos sencillos consejos para pilotear nuestra vida rumbo a la felicidad.
El monje Budista Matthieu Ricard es considerado como “El hombre más feliz del Mundo" y nos dice que "Ser libre" significa tomar las riendas de la propia vida. No es soltar el timón, dejar que las velas floten al viento y el barco parta a la deriva, sino pilotarlo poniendo rumbo hacia el destino elegido.
Consejos para ser feliz
Muchas veces he escuchado a la gente decir: "quiero ser feliz, pero no sé cómo. He intentando un montón de cosas y no lo consigo. Estoy cansando o cansada".
Cada persona lo intenta de varias maneras; unos se apuntan a clases de yoga o pilates, hay quienes van a talleres de pensamiento positivo y risoterapia, y otros lo intentan tratando de encontrar a la persona amada, buscando realizarse profesionalmente, formando una familia, o viajando por el mundo. Y todo esto puede hacernos sentir muy felices, y de hecho son formas efectivas, pero es importante que observemos, ¿dónde hemos puesto la motivación, el motor?, es decir, ¿yo me amo a mí y entonces quiero compartir ese amor con otra persona?, ¿estoy haciendo aquello en lo que soy verdaderamente bueno o buena y no me cuesta ningún esfuerzo?,... o por el contrario, no me amo y busco fuera lo que me falta porque no me siento completo o completa.
Vamos a considerar algunos remedios fáciles que os pueden ser de gran ayuda si os animáis a ponerlos en la práctica, y un consejo, ¡no los descartéis por obvios o parecer demasiado simples!. Como os he comentado antes, lo sencillo puede ser lo más difícil, ya que vivimos en una sociedad que nos condiciona a no estar nunca contentos con lo que tenemos; que nos crea necesidades innecesarias y nos incita a querer más y más; a la inmediatez del resultado y a tener un objetivo y al conseguirlo, buscar otro, es decir, a la insatisfacción permanente y como resultado a la infelicidad.
Este "Ritual de la Felicidad", nos da 15 sabios, directos y útiles consejos, con los que estoy totalmente de acuerdo.
Cuando nos levantamos temprano se genera en nosotros una sensación de satisfacción, de tener tiempo para todo lo que nos propongamos hacer ese día y de aprovechamiento del tiempo. Además, la luz del amanecer es una luz especial que nos hace sentir vivos, despiertos y vitales. Disfruta de la luz del día y observa el amanecer tantas veces como te sea posible al año.
¿Cómo quiero vivir este día? Visualiza tu día ideal en el trabajo, con la familia o amigos. Si tienes una visión del mismo, es más fácil que te dé tiempo a vivirlo, y a cambiar lo que no quieres. Es decir, enfócate en cómo te quieres sentir. Y después fluye, vive el presente. Visualizar no es sinónimo de controlar. Visualizar nos ayuda a tener una clara intención de la dirección que queremos seguir.
Además, "no dejes para mañana lo que puedas hacer hoy". Tener cosas pendientes y postergar, o sumergirnos en la pereza, nos genera una sensación de insatisfacción y frustración, así como de bloqueo y agobio.
Esto puede parecernos de perogrullo, pero te aseguro que es la clave de la felicidad. Todo este artículo se podría resumir en esta frase: "Me amo, me acepto y me aprecio". Ya que la no felicidad es consecuencia de no amarnos. Si nos amamos, vamos a hacer aquellas acciones que nos lleven a estar mejor aún, relacionarnos con aquellas personas que nos ayudan a crecer y sentirnos bien, alimentarnos con lo que es bueno para nosotros, etc. Por lo que, he aquí el "gran secreto, mejor guardado"... ¿Me amo?
Hipócrates ya decía: "Haz de tu alimento tu medicamento". En un país como el nuestro, donde la mayoría de los encuentros sociales pasan por un momento de "comer", a veces resulta difícil comer sano, ya que valoramos mucho el "buen comer". Y con esta frase, no siempre nos estamos refiriendo a comer sano, sino más bien a comer en cantidad, con una buena cerveza o vaso de vino, y generalmente con carne de por medio. Y que conste que no digo que esto sea malo o incorrecto.
Pero, comer mucho aturde nuestros sentidos y nos genera sensación de pesadez. Además, ¿como porque lo necesito o como para "premiarme" o para "tapar" lo que no me gusta?
Hace muchos años me dijeron algo que para mí fue crucial, y que quiero compartir aquí con vosotros para que reflexionéis sobre ello: si tuvieras todo el dinero del mundo, si no tuvieras que pensar en el dinero para nada, ¿qué estarías haciendo? ¿estarías haciendo con tu vida lo que estás haciendo ahora mismo?
Todos tenemos cualidades y habilidades especiales y que nos diferencian de los demás, y en las que somos muy buenos. ¡Persigue cada día tus sueños! y terminarán pagándote por hacer aquello que amas.
Estar en silencio un rato cada día para meditar es uno de los grandes regalos que nos podemos hacer. Parar y escucharnos profundamente, sentirnos y estar con nosotros unos minutos al día. ¡Inhalar y exhalar! Esto que puede parecer tan fácil, no lo es. Ya que no ponemos conciencia al hacerlo. También podemos bailar y escuchar música, un auténtico alimento para el espíritu.
Cuando hablamos de hábitos saludables, muchas personas piensan -hábitos aburridos-. Aunque no nos lo creamos, ésta es una gran resistencia que tenemos. Hemos asociado que lo saludable no es divertido, y ¡es todo lo contrario!
No hagas nada que te esclavize, nada que te haga daño... compra canapés de esquinas redondeadas y no te hagas daño golpeándote al pasar. También hay que evitar accidentes! jajaja.
Las propuestas "saludables" son: camina entre 10 y 30 minutos todos los días y si es posible por la naturaleza o en un parque; sonríe a las personas; no te "enganches" porque piensen diferente a ti; ríe a carcajadas todos los días; haz ejercicio físico; rodéate de personas positivas; expresa tu afecto; contempla la belleza del mundo que te rodea, la maravilla de la vida y la majestuosidad del cielo.
Cuantas veces he oído la expresión: - No tengo tiempo para nada y menos para mí-. El trabajo, la familia, la casa,... nos vamos cargando de obligaciones y nos dejamos para el final, cuando ya no hay tiempo o estamos tan cansados que solo queremos dormir y mañana será otro día. Una buena organización y priorización de necesidades hará que probablemente haya tiempo para todo y si no lo hay, al menos, que nosotros no nos dejemos para el final.
Empieza eliminando el desorden de tu casa, coche y escritorio, y deja que nueva energía fluya en tu vida. Si estamos contentos, descansados y nos hemos regalado un tiempo para hacer aquello que nos gusta como puede ser leer, pintar, escribir, tomar algo con un amigo, ver una película, hacer deporte, caminar, etc. También estaremos más motivados para hacer aquello que nos apetece menos. Es, como dice el refrán "la pescadilla que se muerde la cola". Si no saco tiempo para mí, al final, tampoco sacaré tiempo para hacer todo aquello que quiero hacer, porque realmente estaré más cansado y desmotivado y con menos energía. Si paro, me regalo un tiempo, esto me impulsará a querer hacer más cosas.
Rodearse de los seres queridos y de aquellas personas con las que compartimos gustos, aficiones y placeres, nos hará sentirnos felices.
Nuestro tiempo es muy valioso, por lo que es importante que empieces a valorarlo y a valorarte. Evita, por tanto, a personas con las que no te sientas realmente bien y aquellas que son muy negativas y siempre tienen un problema para cada situación. No gastes tu precioso tiempo en chismes, cosas del pasado, pensamientos negativos o lo que hay fuera de tu control. Invierte tu energía en lo positivo del presente.
Busca gente con la que te rías y no compares tu vida con la de otros, no sabes el camino que han andado en la vida. Llama y escribe, ¡toma la iniciativa! Y no te vayas a dormir sin haber pedido perdón y soltado cualquier asunto pendiente que pudieses tener con tu pareja o darle un beso. ¡Besar, tiene un maravilloso poder curativo!
Ya he escrito sobre la importancia de sonreír, pero merece la pena hacerle un apartado especial. Sonreír es tan beneficioso para nosotros como para el que ve nuestra sonrisa. Cuando sonreímos, nuestro cuerpo lo interpreta como señal de felicidad, y quien la ve se relaja y se siente agusto. No te tomes a ti mismo tan en serio. Nadie más lo hace.
¡Confía en ti mismo! Es muy importante para sentirte feliz que creas en ti, que te valores y te ames. Todo está en ti y eres muy valioso. Te recomiendo que escribas listas con las capacidades que tienes. De esta manera verás como poco a poco te vas dando cuenta que tienes muchas más de las que pensabas. Ejemplo: soy capaz de: comer, andar, escuchar, pintar, escribir, conducir, parpadear,... Y escucha tu mente cuando quiera pararte y desvalorizarte, ya que te dirá cosas del estilo -ya, pero hay otros que lo hacen mejor, o esto no es útil o vaya tontería- No le hagas caso. ¡Podemos hacer todo aquello que nos propongamos!
La sabiduría refranera ya nos dice ¡No te acostarás sin saber una cosa más! Y la realidad es que todos los días aprendemos algo nuevo. Esto es fácil verlo cuando estamos cerca de un bebé, que de un día a otro pasa de no saber dar palmitas a imitarte y aprender. Pero cuando somos adultos, ya no nos fijamos y no valoramos lo que aprendemos diariamente. Aún así, vamos a poner la intención en aprender cosas nuevas, sea desde utilizar el ordenador, una fecha o hacer una comida. Y, ¡conoce gente nueva!. Anímate a presentarte a alguien que te cae bien simplemente con una sonrisa y diciendo: “Mi nombre es... Todavía no nos han presentado”.
Dar y recibir es un flujo continuo de energía. Compartir nos hace sentir felices. Si quieres recibir, da primero y al mismo tiempo, cuando das ábrete a recibir. Es la Ley de la atracción: Si das, recibirás aquello que quieres y cuando recibes es porque has dado. Van de la mano. Pero es importante que aprendamos a recibir. A veces, nos es más fácil dar y hacer cosas por los demás que permitir recibir. Esto terminará cansándonos y no nutriéndonos. Además, el mensaje que estamos emitiendo al universo, y en particular al otro es, no soy merecedor de recibir, no quiero lo que me das. ¡Cuidado con nuestros mensajes implícitos!
Por otro lado, da ¡GRACIAS! Esto aumentará también tu felicidad. Puedes empezar probando cada noche, cuando estés en la cama, con lo siguiente: “Doy gracias por…”, y aquí puedes dar gracias por todas las cosas buenas y maravillosas que te han pasado durante el día.
Ya he hablando mucho sobre esto, y no quiero incidir mucho más. Pero te aseguro, que es posible vivir de aquello que amas. Y si no te lo terminas de creer, al menos, saca tiempo libre para seguir alimentando tus pasiones. Ámate y ama todo lo que te rodea, y lo que no te guste, cámbialo. Hay un dicho que dice: lo único que nunca cambia es que todo cambia.
Nunca confundas riqueza con éxito, ni confort con felicidad. La vida es una escuela y estamos aquí para aprender. Los problemas son lecciones que van y vienen. Recuerda que la felicidad no es una meta sino un camino: disfruta mientras lo recorres. Celebra tus logros, por pequeños que sean. ¡Celebra tu vida!
¡PONGAMOS DE MODA LA FELICIDAD!, y recuerda, que nadie está a cargo de tu felicidad excepto tú mismo.
Son muchos los mitos y leyendas que se asocian a las noches de luna llena. La existencia de los hombres lobo, un aumento de la violencia, los lunáticos… La verdad sobre estos y otros mitos no los vamos a discutir en el post de hoy. Nos centramos en saber si se duerme peor con luna llena.
El ciclo lunar está asociado a mucho de los biorritmos de las personas. Hay evidencias de que con los cambios de luna, los partos se aceleran. La luna y sus ciclos afectan a las personas, pero ¿afectan, también a su descanso?
La melatonina es la hormona que segrega nuestro cuerpo ante la ausencia de luz. Al segregarla se induce al sueño. En las noches de luna llena hay mayor luminosidad, por lo que es lógico pensar que las personas que duermen sin elementos de protección como persianas, cortinas, contraventanas están expuestos a esta luz lunar y la segregación de melatonina se siente afectada y por ende su sueño.
Una investigación de la Universidad de Basilea en Suiza demostró, a la vista de analizar el sueño de 33 personas durante los días de luna llena, que esta fase afecta negativamente al sueño. Cada día que se iba acercando el plenilunio, las personas tenían más dificultades para dormirse y su descanso era peor. El estudio ha sido publicado por la revista la Current Biology.
Lo que llama la atención de este estudio, es que se realizó en un laboratorio, en el que los durmientes no estaban expuestos a la luz lunar. En el experimento se medía la actividad cerebral de los participantes durante la fase REM, sus movimientos oculares y la secreción de hormonas. El estudio concluye que sí existe una relación entre la fase lunar y el descanso. “Los humanos responden a los ritmos geofísicos de la luna”, asegura la investigación.
El estudio demostró que durante el periodo de luna llena, la actividad cerebral durante las fases del sueño profundo se reduce en un 30%. A esto hay que añadir, que los durmientes analizados tardaban cinco minutos más en quedarse dormidos y despertaban veinte minutos antes. Además, aseguraban que su descanso había sido peor comparado con las otras noches, donde la luna se encuentra en otras fases de su ciclo. Por lo que respecta a sus niveles de melatonina, las mediciones realizadas en las noches de luna llena, daban como resultado una cantidad menor.
La existencia de esta conexión entre luna llena y descanso, según los científicos está relacionada con la herencia de nuestro pasado. Se cree que en los albores de los tiempos, determinados aspectos de la biología humana como la reproducción estaban sincronizados con las fase lunares, como también sucede en muchas especies animales. Está sincronización ha pasado de generación en generación, estando en nuestro genes. Por ello, en las noches de luna llena se duerme peor.
Estamos acostumbrados a un ritmo de vida sobrehumano (trabajo, prisas, casa, niños...) que nos puede llegar a superar, desencadenando el estrés. Un proceso de reacciones que nuestro cuerpo exterioriza, frente a situaciones que podemos llegar a percibir como amenazantes; nos provoca tensión, nerviosismo, fatiga, insomnio. Afecta a nuestra calidad de vida, y si no actuamos, puede generar problemas más graves. ¿Habéis pensado en el yoga y sus beneficios para superar el estrés?
El Yoga tiene una finalidad muy clara, el equilibrio del cuerpo y de la mente. Cada vez son más los especialistas que recomiendan su práctica, basándose en sus beneficios: favorece la oxigenación, fortalece la musculatura, actúa sobre el sistema nervioso, digestivo y circulatorio. Ayuda a solucionar problemas de insomnio (gracias a la relajación, que propicia el sueño y el descanso), aumenta la confianza, la autoestima y ayuda en estados depresivos.
¿Qué es el yoga?
Es un conjunto de disciplinas milenarias que provienen de la India; una filosofía, que tiene como objetivo la evolución física y mental, el equilibrio para alcanzar la perfección; Significa unión. El pensador hindú Patañjali, estructuró el yoga en 8 fases en sus textos Yoga-Sutra con la finalidad de la autorealización. Actualmente está considerado como una actividad relacionada al estilo de vida saludable.
Encontramos diferentes tipos, como el Raja Yoga, Karma Yoga, Puma Yoga...Yeli Jimenez, experta en la modalidad Iyengar, nos aconseja ésta, como medio para reducir el estrés y conseguir un sueño reparador. Es una modalidad en la que prima la máxima concentración en el control del cuerpo y de la respiración para la práctica de las posturas. Suelen utilizar elementos de ayuda como sillas, almohadones…
Practicarlo en casa
Únicamente necesitas 20 minutos al día y un espacio limpio, ventilado y tranquilo. Yeli nos resume diferentes posturas (ásanas).
El Árbol. De pie con los pies juntos, lleva las manos unidas al pecho, sube la planta del pie a la parte interna del muslo contrario; eleva los brazos sin separar las palmas por encima de la cabeza.
El Guerrero. De pie, damos un amplio paso hacia delante, nos ajustamos a 45º, flexionamos la pierna delantera y subimos los brazos.
La Vela. Acostados flexionamos las rodillas al pecho, elevamos la cadera hasta llegar a una posición en la que solo apoyemos en el suelo cabeza, hombros y brazo.
Si queréis ampliar la información sobre las infinitas posturas que se pueden realizar en casa, no os perdáis el artículo de la Revista Marie Claire sobre 10 ejercicios de Yoga para practicar en casa.
Sabemos que el yoga es apto para todos los públicos, pero los datos que aportamos, son a nivel informativo, os aconsejamos que os pongáis en manos de profesionales y prestéis atención a vuestras limitaciones físicas.
¡Se dice que quién dedica un minuto al yoga gana un minuto de sueño reparador!, por lo que vamos sumando minutos…¡Ánimo, a por tu equilibrio físico y mental!, a por tu descanso reparador. Recuerda lleva una vida sana, presta atención a los hábitos de sueño, utiliza un colchón adecuado, haz deporte con regularidad y lleva una alimentación variada.