Los colchones se hacen blandos con el tiempo

El paso del tiempo y el uso hace que los colchones pierdan firmeza, se hagan más blandos. Que los colchones se hacen blandos con el tiempo es una realidad. Sin embargo, hay que diferenciar la pérdida de firmeza del hundimiento.

Un colchón se considera que está hundido si ha perdido el 10% de su grosor. Si un colchón está hundido, hay que renovarlo ya que no está en condiciones óptimas de ofrecer un descanso reparador.

Por qué los colchones se hacen blandos con el tiempo

Los colchones se adaptan al cuerpo del durmiente. A medida que pasa el tiempo, van perdiendo firmeza, se hacen más blandos, porque se amoldan a la forma del cuerpo del durmiente y ofrecen confortabilidad.

La resiliencia de un colchón es la capacidad de recuperar la forma original una vez que la presión del cuerpo desaparece. Esta capacidad se va reduciendo con el tiempo, los colchones van perdiendo esta elasticidad.

Esto se debe a que las capas de acolchado, las que están más en contacto con el cuerpo se van apelmazando con el uso y el paso del tiempo. Cuando se apelmazan se reblandecen.

Además de los acolchados, también se puede apelmazar el núcleo de los colchones. Este es el caso de los colchones de espumación y los de látex.

Los colchones de espumación se hacen más blandos

Durante la fabricación de los colchones de espumación, se inyecta aire comprimido a los bloques de espuma. Esto hace que la espuma se expanda.

A medida que se va usando el colchón de espuma, las células de aire comprimido se rompen. Así se consigue que el colchón gane suavidad, confort y adaptabilidad. Se va perdiendo firmeza y se siente más blando.

Este hecho hay que tenerlo en cuenta a la hora de comprar un colchón de espumación. Si vamos a una tienda y probamos colchones de espumación, hemos de entender que los modelos que probamos ya han perdido esa firmeza, por el simple hecho de estar soportando los pesos de los durmientes que lo prueban.

Cuando el modelo elegido, nos llega a casa. No tendremos la misma sensación que el que hemos probado en la tienda. Porque no se ha producido aún la rotura de los poros. Lo notaremos más duro.

Para evitar que estas diferencias sean muy notables, hay muchos fabricantes y distribuidores que sirven los colchones de espumación enrollados. Esto hace que se simplifique el proceso de entrega y además, se rompa el poro. En estos casos, la diferencia entre el colchón que hemos probado en la tienda y el que nos llega a casa no es tan apreciable, en términos de dureza.

Las espumaciones de mayor calidad como las tecnológicas Airvex de Flex y Bultex de Pikolin y las espumaciones de látex no se reblandecen tanto.

Los colchones de muelles resisten mejor

En el caso de los colchones con núcleos de muelles o muelles ensacados, la pérdida de firmeza se debe al apelmazamiento de los acolchados de espumaciones, viscoelástica o fibras.

Como solo se reblandecen los acolchados, la pérdida de firmeza es menor que en el caso de los colchones de espumación y látex.

Cómo saber si un colchón se ha hundido

Como hemos comentado, no es lo mismo el apelmazamiento de los colchones que su hundimiento.

Un colchón que va perdiendo firmeza se muestra con ondulaciones en las zonas de más peso corporal. El colchón se adapta al cuerpo para evitar presiones. En cambio, un colchón hundido ofrece la sensación de dormir en una hamaca colgante (forma de u).

Para saber si un colchón se ha hundido hemos de realizar una medición. Si el resultado de esta medición es igual o superior al 10% del grosor del colchón, hay hundimiento.

En este vídeo de nuestro canal de Youtube os explicamos cómo medir el hundimiento de un colchón.

Si el resultado es que el colchón está hundido, es recomendable renovar la superficie de descanso. Porque ya no es confortable.

En Colchones.es te podemos ayudar a elegir tu nuevo colchón. Puedes hablar con nuestros expertos llamando al teléfono gratuito 900.701.086. El horario de atención es de lunes a viernes de 8 a 14 y de 16 a 20 pm. (salvo festivos nacionales).