Los ataques de gota se producen cuando nuestros niveles de ácido úrico están elevados. La gota se conocía como la enfermedad de los reyes, porque se produce cuando hacemos excesos en la alimentación, y antiguamente estas “comilonas” estaban reservadas solo para los miembros de la Corte.
Estamos próximos a las Navidades, una época propicia para comer en exceso y darnos atracones. En estas fechas los alimentos que más elevan el ácido úrico son los grandes protagonistas de nuestra dieta. Los mariscos, las carnes rojas, las bebidas alcohólicas, estarán en nuestro menú navideño, pero hay que tomarlos con moderación, sobre todo aquellas personas que son propensas a sufrir ataques de gota.
Todos tenemos en nuestro organismo ácido úrico, esta sustancia se genera al metabolizar las proteínas llamadas purinas. Estas proteínas están presentes además de en los alimentos y bebidas nombradas en el párrafo anterior, en las vísceras de los animales y en algunas verduras. No debemos abusar de ellas.
Las personas más propensas a tener el ácido úrico elevado son los hombres y las mujeres después de la menopausia. Hay una predisposición genética a sufrir esta enfermedad, pero también afecta nuestra alimentación y padecer sobrepeso, ya que un peso elevado altera el metabolismo. En España hay más de 7 millones de personas que tiene el ácido úrico elevado. Se detecta con un análisis de sangre u orina.
Las consecuencias de tener el ácido úrico elevado se notan en nuestras articulaciones y en nuestro riñón. Un alto nivel de este ácido provoca que los riñones no filtran correctamente la sangre y las sustancias tóxicas se quedan en la sangre y acaban inflamando las articulaciones, provocando fuertes dolores, es lo que se conoce como ataque de gota.
Otra de las consecuencias añadidas son los cólicos nefríticos. El ácido úrico se cristaliza y se deposita en los riñones, piedras en el riñón, que cursan con un fuerte dolor desde la zona trasera a la zona delantera de nuestro cuerpo y puede colorear la orina de color más oscuro o con sangre. Es importante acudir a un especialista para que curse el tratamiento.
Alimentos para prevenir los ataques de gota
Para evitar los ataques de gota debemos eliminar de nuestra dieta aquellos alimentos con un alto nivel de las proteínas purinas que al metabolizarse elevan el ácido úrico. Estos alimentos son las carnes rojas, las vísceras de los animales (morro, cerebro, hígado, riñones, morro, patas, callos), pescados azules como las conservas de anchoas, boquerones, sardinas, atún, verduras de hoja verde como las espinacas, acelgas, coliflor, espárrago verde, puerros, setas, champiñones, natas, dulces, bebidas alcohólicas y mariscos.
Mirándolos bien, estos alimentos son los grandes protagonistas de los menús navideños, pero hay alternativas que podemos incorporar en las comidas y cenas de estas próximas fiestas. Es aconsejable sustituir las carnes rojas por carnes blancas (pollo, pavo), las verduras de hoja verde sustituirlas por zanahoria, apio, lechuga, el pescado azul por el blanco. Los cereales, la miel y los frutos secos también son alimentos que nos ayudarán a evitar los ataques de gota. Y sustituir las bebidas alcohólicas por agua carbonatada.
Otra de nuestras recomendaciones es acompañar la dieta con el ejercicio. Si nos pasamos comiendo estos días es bueno salir a caminar. Los paseos fortalecen nuestros músculos y evitan que se inflamen las articulaciones. El ejercicio es fuente de salud.